Entrena tu descanso - Pilates Ambassador
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Entrena tu descanso

No todo entrenamiento es físico. ¿Sabes que el descanso es una parte muy importante del rendimiento? Si así lo concibes, ¿lo llevas a la práctica?

Como definición “el entrenamiento es cualquier preparación o adiestramiento con el propósito de mejorar el rendimiento físico o intelectual. En conexión con el deporte, el entrenamiento implica una preparación física, técnica y psicológica para el desarrollo de las capacidades del deportista”. Por una parte me alegra saber que la definición incluye aspectos psicológicos como parte implicada en el entrenamiento, pero si te fijas no se contempla en la definición el aspecto del descanso.

Seguramente si te hablan de entrenar lo primero que te viene a la cabeza es la práctica de ejercicio físico, ya sea aeróbico o anaeróbico.

Mi objetivo en  este post es que consideres que el descanso forma parte del entrenamiento. Te animo a que elimines ese pensamiento dual entrenamiento-descanso. Todo forma parte del entrenamiento, y para optimizar el rendimiento es necesario tanto entrenar las habilidades mentales y físicas, como considerar el tiempo de descanso necesario donde cuerpo-mente asimilen y procesen la información, los tejidos reparen y recuperen químicamente y se generen nuevas conexiones neuronales.

Considerando todo esto sería muy atrevido concebir el entrenamiento como una mera repetición de ejercicios o movimientos que lleven a la perfección, y que cuanto más repitas, más sudes, más sufras… mejor. Oh! Esto más bien parece una penitencia!

Cuando practicamos ejercicio físico o algún deporte (no hace falta que sea élite) no sólo importa la calidad de entrenamiento, sino también la calidad de recuperación. Existen fuentes de sobrecarga que derivan en estresantes físicos y psicosociales y pueden llevar al individuo a un estado de sobreentrenamiento, fatiga crónica o agotamiento. Un nivel óptimo de estrés te hace sentir vivo y activo, ¡pero cuidado!, puede convertirse también en tu enemigo.

Vivimos en una sociedad de “cuanto más, mejor”. Cuantos más títulos, más conocimiento; cuantas más horas de trabajo, mayor productividad; cuantas más repeticiones mejor resultado… ¡Todo mentira!

Estar o aparentar estar al 100% está sobrevalorado. Todo porque le damos ese juicio de valor positivo al esfuerzo (¡Eres un máquina!) y negativo al descanso (¡Eres vago!, ¡pierdes tiempo!).

 

¿Cómo reconocer el sobreentrenamiento? Estos son algunos de los signos y síntomas:

Si identificas alguno de estos síntomas, ¡PARA, tómate un respiro!

Bajo mi propia experiencia y el trabajo con deportistas he considerado una serie de pautas  que pueden ayudarte como estrategia en la calidad de recuperación:

  • Descanso activo: elige cambiar de actividad durante ese periodo. Estos cambios de patrón de movimiento y de intensidad actúan como un refresco para tu conexión neuro-motora.
  • Visualización: esta forma de simulación bien utilizada activa las mismas áreas cerebrales que cuando estamos en movimiento. La visualización juega un papel tanto cognitivo como motivacional para mediar la conducta.
  • Disociación: tómate tiempo y mira una película, lee un libro o simplemente contempla.
  • Sueño: para mí una de las pautas más importantes ya que es donde se forjan nuevas conexiones neuronales y también tiene un rol en el bienestar emocional. Funciones inmunes, endocrinas, de aprendizaje y memoria se dan en este período de descanso obligatorio.

 

Disfruta de tu descanso tanto como de tu entrenamiento y escucha tu cuerpo. ¡A mí me funciona!

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